¿DESDE CUÁNDO Y CÓMO NOS CONVERTIMOS EN UN PAÍS DE MENTIROSOS Y ENGAÑADORES?
Me entristece tener que admitir que la verdad en los asuntos públicos ha sido desechada al canasto de la basura, solo para dar paso a la mentira y al engaño de los ciudadanos.
Esto no es algo exclusivo de una situación en particular, sino más bien una práctica común en todos los ámbitos de la vida en nuestra pequeña Republica «PURA VIDA» de plantaciones de café, banano y piña.
Tomemos, por ejemplo, el apremiante descontento social por el aumento continuo en los precios del combustible:
Como un «primer paso» para abordar este problema, los ejecutivos de Recope y los legisladores han anunciado la aprobación de una nueva ley que prohíbe la contribución de Recope al fondo de ahorro de los empleados de esa Empresa.
Esto cuando en realidad, es ampliamente sabido que los gastos de operacion de RECOPE inside solo un 2% en el precio del combustible; Incluyendo la susodicha contribución al fondo de ahorro que por ley se ordena eliminar.
Mientras que el IMPUESTO UNICO del Estado supera el 30% y el costo y margen de distribucion (gasolineras) anda alrededor de un 10% del precio que pagamos los consumidores. Pero en esta situación han elegido a RECOPE y a sus empleados como los villanos de turno.
A pesar de que alrededor de un 40% del precio que pagamos por los combustibles corresponde a impuestos para financiar una BUROCRACIA ESTATAL IMPRODUCTIVA, y las INTOCABLES ganancias de las gasolineras.
Esas burocracias no solo son improductivas, sino, que obstruyen la paz y tranquilidad de los ciudadanos, como en el presente caso del Parque Nacional de CAHUITA.
En este último caso, la ineficiencia de varios órganos adscritos al MINAET junto con la del Poder Legislativo – (deliverada o por incompetencia), están en plena marcha tratando de que se fije un nuevo precio de $15 dólares por persona en la entrada al sector de Playa Blanca del Parque Nacional de Cahuita; mientras se echa la culpa a la Contraloría General de la Republica.
De nuevo, una vez más se tilda a la Contraloría General de la República de villanos de una injusticia social orquestada por la inacción e ineficacia de los órganos del Poder Ejecutivo y los Legisladores del País.
Así lo veo yo, desde mi perspectiva como adulto mayor en el Distrito de Cahuita, Cantón de TALAMANCA, Provincia de Limón.
Fuente: Bernardo Archer